La pizza margarita es la pizza napolitana más popular, junto con la pizza marinera. En la versión tradicional, el queso mozzarella no está hecha de leche de búfalo, si no de vaca, lo que le da un sabor ligeramente distinto.
La tradición cuenta que en junio de 1889, para honrar a la reina de Italia, Margarita de Saboya, el cocinero Raffaele Esposito de la pizzería Brandi creó la pizza Margarita, representando con sus condimentos (tomate, mozzarella y albahaca) los colores de la bandera italiana. Fue la primera receta en incorporar queso en la elaboración de la pizza.
Si le interesa aprender a hornear este plato emblemático del país italiano, a continuación tiene una receta sencilla para que pueda hacer y compartir una sabrosa pizza italiana con todos sus familiares y amigos. Sin duda les encantará a todos. ¡Buon appetito!
Ingredientes (4 personas):
– 3 cucharadas de aceite
– 1 chorrito de aceite de oliva
– 18 cucharadas de agua fría
– 6 cucharadas de agua tibia
– 500 gramos de harina
– 10 gramos de levadura
– 120 gramos de mozzarella desmenuzada
– 1 cucharada de orégano
– 1 cucharadita de sal
– 400 gramos de tomate triturado
Preparación:
- Mezclar la levadura con la mitad del agua tibia y dejar reposar en un lugar tibio hasta que forme espuma.
- En un bol mezclar un tercio de la harina con la sal e incorporar el resto del agua tibia, los dos tercios del agua fría, el aceite y la levadura.
- Mezclar todo y, poco a poco, ir añadiendo el resto de la harina para que vaya absorbiendo todo el líquido y corregir de agua si es necesario.
- Cuando ya se haya formado una bola, pasar la masa a una mesa enharinada
- Amasar con los nudillos por unos 10 minutos, incorporando la harina restante hasta formar una bola suave y elástica.
- Poner en un bol ligeramente aceitado y pincelar con aceite.
- Cubrir el recipiente con un paño y dejarlo reposar a temperatura ambiente unas dos horas.
- Pasado este tiempo, volver a amasar un poco con los nudillos para quitarle el aire.
- Dividir en cuatro partes iguales y formar bolas con ellas.
- Con los dedos estirar cada una de las bolas hasta obtener pizzas redondas de medio centímetro de alto como máximo. En los bordes el espesor es ligeramente más alto para que pueda retener los ingredientes.
- Una vez preparada y extendida la masa, disponer sobre ella los condimentos por el siguiente orden: Extender el tomate a modo de película, después la mozzarella, el orégano, regándola finalmente con un chorrito de aceite.
- Añadidos los condimentos, la pizza ya está lista para meterla en el horno, engrasando previamente la plancha donde se va a depositar para que no se pegue.
- Hornear a horno fuerte de 5 a 10 minutos según el grosor final de la masa.La temperatura del horno de leña a temperaturas de 300 a 400º centígrados.
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