OTÁROLA RENUNCIÓ POR MENSAJES CALIENTES

La renuncia del ahora expresidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola, ha marcado un giro significativo en el panorama político del país. En su declaración pública, Otárola destacó dos motivos principales para su dimisión: brindar tranquilidad a la presidenta Boluarte para que pueda reestructurar su gabinete según considere oportuno y continuar sirviendo al país desde otro ámbito. Esta decisión refleja un gesto de responsabilidad y coherencia con los principios de transparencia y ética en el ejercicio del poder.

En medio de su renuncia, Otárola rechazó categóricamente las acusaciones de haber realizado contrataciones irregulares, afirmando que tales afirmaciones son falsas y parte de un intento de desprestigio. Además, señaló directamente a Martín Vizcarra como responsable de la difusión del polémico audio que desató la controversia, implicando a un amplio espectro de actores políticos en lo que denominó como un complot contra su persona.

Las acusaciones de Otárola no solo apuntaron a Vizcarra, sino que también incluyeron al canciller Javier González Olaechea, a quien calificó de «desubicado y majadero» por adelantar su renuncia. Estos señalamientos evidencian el clima de confrontación política que rodea este episodio y la tensión entre las diferentes facciones políticas.

En este contexto, la renuncia de Otárola representa un punto de inflexión en la actualidad política del país y pone de manifiesto la necesidad de abordar con seriedad y responsabilidad los desafíos que enfrenta la administración pública. Es imperativo que las instituciones actúen con transparencia y diligencia para restaurar la confianza de la ciudadanía en el sistema político y promover un ambiente de estabilidad y gobernabilidad. Finalmente, a Otárola le pasó lo mismo que a Vizcarra, no tener una bancada congresal que lo respalde y lo defienda. Ojalá siga después la caída de Dina Boluarte, aunque esa acción contará con la participación de la población y la sociedad civil que se organice por fuera del congreso.