La ‘Marcha por la Democracia’ en Perú fue un notable compromiso de la sociedad con la preservación de las instituciones del país. Reuniendo a más de 100 organizaciones y ciudadanos de diversos orígenes, su objetivo principal era evitar la desintegración de la Junta Nacional de Justicia (JNJ) por parte del Parlamento. La movilización comenzó con un grupo de trabajadores reunidos aproximadamente desde las 3:00 de la tarde, con la finalidad de: Proteger la democracia ante la preocupación de un posible abuso de poder por parte del Legislativo.
La diversidad de la marcha fue impresionante, dirigida en un principio por la Plataforma por la Democracia, constituida por sindicatos, gremios, ONGs, colectivos ciudadanos y grupos universitarios. A medida que avanzaba, se unieron personas independientes y diversas organizaciones civiles, resaltando la naturaleza inclusiva y representativa del movimiento.
El secretario general de la CGTP, Gerónimo López, subrayó que esta marcha es solo el inicio de una serie de actividades planificadas en todo el país, un llamado claro tanto al Gobierno de Dina Boluarte como al Congreso de la República para que cedan el poder y permitan el florecimiento de la democracia. La marcha se desarrolló de manera pacífica en Lima y en otras regiones, donde también se llevaron a cabo protestas en contra del Gobierno y en busca de justicia para las víctimas de protestas previas.
Además, la movilización dio voz a los trabajadores de la construcción civil, que enfrentan un aumento en el costo de vida y la canasta familiar, exigiendo un aumento salarial. Este evento es un recordatorio poderoso de la importancia de abordar las preocupaciones económicas de la ciudadanía en medio de la defensa de la democracia. En síntesis, la ‘Marcha por la Democracia’ destaca que la defensa de las instituciones democráticas une a las personas más allá de las diferencias políticas, y su determinación debe inspirar a todos los que valoran la democracia en Perú y en todo el mundo.
