La planta de sábila, también conocida como Aloe vera, es una de las más famosas por sus propiedades medicinales y usos cosméticos. Es utilizado, desde hace milenios por los nativos de América, pues, sus beneficios son extensivos a cualquier sector de nuestro cuerpo, bien sea a nivel interno o externo.
Esta planta de color verde y parecida a la corona de una piña, pero más grande y con más espinas, tiene hojas gruesas con mucha pulpa que contiene agentes antisépticos, capaces tratar problemas comunes como acné, quemaduras cutáneas, manchas, deshidratación, heridas que ameritan de cicatrización, entre otros.
Existen muchas variedades de sábila, como Aloe arborescens, Aloebarbadensis, AloeAristata,Aloebrevifolia, Aloeciliaris,Aloefero, Aloe saponaria,Aloestriata, Aloevariegata y AloeJuvenna. Para el tratamiento se pueden utilizar los cristales de gel de la sábila directamente en la piel.
Su contenido alto de vitaminas y minerales, ayudan al correcto crecimiento y funcionamiento de todos los sistemas del cuerpo. Además, funciona como un suplemento dietético que reduce el colesterol y mejora la circulación.
Diversos estudios han comprobado que esta planta favorece la absorción de nutrientes, ayudando a eliminar los gérmenes nocivos en el aparato digestivo, ya que, actúa como un reconstructor de la flora intestinal y es eficaz para atacar las bacterias que producen las úlceras estomacales.
En algunos casos de diabetes tipo II, la sábila ayuda a regular los niveles de triglicéridos y glucosa. Otras afecciones como el asma también se pueden reducir con esta la planta.
Redacción: Paula Dax
