La semana del Día Internacional de la Mujer, el Congreso peruano, mayormente controlado por el fujimorismo y sus aliados, desilusionó al no cumplir con su compromiso de llevar a cabo un Pleno Mujer. En cambio, se dedicó a discutir la inhabilitación de Inés Tello, de la Junta Nacional de Justicia, basándose en su edad, ignorando su vasta experiencia y competencia en el ámbito judicial. Esta acción refleja una priorización equivocada de las agendas legislativas, mostrando una falta de compromiso real con los derechos y necesidades de las mujeres peruanas.
El Pleno Mujer, inicialmente programado para el 7 de marzo, se esperaba como una oportunidad para abordar proyectos de ley destinados a promover los derechos de las mujeres. Sin embargo, las propuestas presentadas, como el fortalecimiento de los Centros de Emergencia Mujer y la incorporación del Ministerio de la Mujer en la lucha contra la trata de personas, carecían de verdadero impacto y reflejaban una visión limitada de las necesidades femeninas.
Es preocupante observar cómo las iniciativas legislativas relacionadas con la igualdad de género y la protección de los derechos de las mujeres son postergadas o desvirtuadas en el Congreso. Proyectos como la entrega de kits de emergencia a víctimas de violación sexual y la despenalización del aborto en casos de violación languidecen en comisiones, mientras que propuestas conservadoras ganan terreno, reflejando una falta de voluntad política para abordar problemas urgentes.
La presidencia de la Comisión de la Mujer por parte de Milagros Aguayo, conocida por su postura ultraconservadora, ejemplifica la influencia de agendas ideológicas retrógradas en el legislativo. Las decisiones tomadas en esta comisión, como proponer cambiar el nombre del Ministerio de la Mujer por el de Ministerio de la Familia, muestran una clara intención de socavar los avances en materia de género y derechos de las mujeres en el país. Es fundamental que la sociedad peruana exija un cambio de rumbo en el Congreso y promueva una agenda legislativa verdaderamente inclusiva y progresista.
