Gabriela Espinar, economista de REDES, destacó que esta expansión no solo tendrá un impacto positivo en la economía nacional, sino que también contribuirá a la generación de empleo y al incremento de la productividad empresarial.
El Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) proyecta un crecimiento del 4.1% en la inversión privada para 2025, superando el 2.3% estimado para 2024 y revirtiendo la caída del -7.1% en 2023. Gabriela Espinar, economista de REDES, destacó que esta expansión no solo tendrá un impacto positivo en la economía nacional, sino que también contribuirá a la generación de empleo y al incremento de la productividad empresarial. Entre los principales impulsores de este crecimiento se encuentran el Puerto de Chancay, que fortalecerá el comercio exterior, y el proyecto minero Tía María, que dinamizará el sector minero. Además, la minería y la manufactura seguirán desempeñando un papel clave, con crecimientos proyectados de 1.8% y 6.6% en 2024, respectivamente.
Sin embargo, el crecimiento de la inversión privada dependerá de un entorno político y económico estable. La inseguridad y las crisis políticas pueden afectar la confianza empresarial y frenar el dinamismo económico. En este sentido, Espinar enfatizó que mejorar la estabilidad política y fortalecer la seguridad ciudadana son factores clave para fomentar la inversión privada, impulsar la creación de empleos formales y garantizar un desarrollo económico sostenible en el país.