Vladimir Pinto, coordinador del programa de recursos naturales y Amazonía de Oxfam Perú, mostró su preocupación por el incremento de la agroindustria de la palma aceitera en el país, ya que se realiza sin las condiciones institucionales adecuadas que controlen esta actividad.
“Lamentablemente eso ha conllevado a la destrucción de los bosques vírgenes. Esto ya ha sido denunciado públicamente el año pasado. Lamentablemente no vemos todavía avances concretos para controlar este fenómeno”, expresó en nuestro programa Cuestión de Estado.
Pinto dijo que el gobierno ofreció originalmente que la agroindustria de palma solo se desarrolle sobre las áreas ya deforestadas, pero el problema surge cuando estas áreas no están debidamente identificadas, lo que contribuye a que las industrias aprovechen este vacío legal para operar sobre bosques vírgenes y reducir sus costos.
Para pinto, una propuesta de solución sería la zonificación de la Amazonía peruana para determinar sobre qué áreas se podría realizar esta actividad.
“El tema de la zonificación es fundamental para cualquier actividad económica y también para esta y lamentablemente Perú avanza en un sentido contrario (…) no nos oponemos a este tipo de actividades, pero si consideramos que deberían de estar muy bien reguladas para no generar daños ambientales”, manifestó.
El coordinador de Oxfam rescató la preocupación que han tenido algunos sectores del estado como el viceministerio de gestión ambiental que alertó de este problema. Sin embargo, según explicó, existe una contradicción entra la legislación que protege los bosques y una normativa vinculada al sector agrario que permite que las tierras puedan valorarse por su capacidad de uso mayor.
“Hay grandes grupos empresariales que están llegando a la selva para apoderarse de amplias extensiones y están generando procesos de deforestación masiva”, agregó.
